Ayudar
Cada día, un pescador atravesaba un empinado camino con dos baldes. Uno abierto, el otro cerrado.
Un amigo le preguntó:
– ¿Por qué llevas siempre un balde cerrado y el otro abierto?
– Es que el balde cerrado tiene cangrejos japoneses. Si lo destapo y uno intenta escapar, será ayudado por los demás y al final, se escaparán todos.
– ¿Y el otro balde?
– El balde abierto tiene cangrejos de otros países. Cuando uno trata de escapar, todos los demás le tiran las patas para que no salga. Y al final, ninguno se escapa.
‘, ‘
FRASE PARA ACOMPAÑARTE EN LA SEMANA:
"Para que pueda surgir lo posible
es preciso intentar una y otra vez lo imposible"
(Hermann Hesse)